Durante los primeros cinco meses de 2025, más de 6.7 millones de argentinos viajaron al exterior, lo que representó un salto del 66% respecto al mismo período del año anterior y convirtió al lapso enero-mayo en el de mayor movimiento internacional desde 2016. Así lo reveló el último informe del INDEC, que también detalló que la mayoría de los viajes se realizó en avión, partiendo principalmente desde el Aeropuerto de Ezeiza y el Aeroparque Jorge Newbery. Sólo en mayo, salieron del país 752.800 turistas argentinos, siendo Europa, Brasil y Estados Unidos los destinos más buscados.
Los viajes se distribuyeron entre destinos regionales y de largo alcance, aunque se evidenció una relación directa entre la distancia del destino y la duración de la estadía. Mientras que países como Uruguay y Chile recibieron un número importante de visitantes por su cercanía, las estadías más extensas se concentraron en Europa y América del Norte. En promedio, los turistas permanecieron 14,3 noches fuera del país durante mayo, aunque los que visitaron Europa llegaron a quedarse más de 21 noches. En total, los argentinos acumularon más de 26 millones de pernoctaciones entre enero y mayo, lo que refleja un impacto económico sustancial para los países receptores.
El volumen de gasto estimado para mayo alcanzó cifras récord. Considerando un gasto conservador de 100 dólares por noche, se calcula que cada argentino gastó en promedio USD 1.430 en su estadía, lo que llevó el gasto total del mes a más de 1.076 millones de dólares entre todos los turistas emisivos. Europa encabezó el ranking no solo en cantidad de turistas (82.300 salidas desde Ezeiza y Aeroparque), sino también en noches de estadía, con casi 1.8 millones de pernoctaciones. Le siguieron Brasil y Estados Unidos con más de 700.000 noches cada uno.
El fenómeno de los viajes al exterior no solo se refleja en cifras, sino también en el contraste con el ingreso de visitantes al país. En mayo, el saldo turístico fue negativo: ingresaron 315.400 turistas no residentes mientras que 752.800 argentinos salieron del país. Esto dejó un déficit de más de 437.000 turistas, marcando una clara diferencia en el movimiento internacional. La vía aérea fue la más utilizada, con Ezeiza y Aeroparque concentrando casi la mitad de las salidas. No obstante, la vía terrestre, especialmente a través del Paso Cristo Redentor hacia Chile, también mostró un importante flujo, con casi 60.000 cruces en ese punto.
Este auge en el turismo emisivo argentino se ve impulsado por una creciente conectividad aérea, precios competitivos y una demanda reprimida de viajes tras años de restricciones. Las cifras actuales evidencian un cambio en el comportamiento del turista argentino, que no solo busca destinos cercanos y accesibles, sino también grandes experiencias en el extranjero, con estadías más prolongadas y un gasto considerable. La recuperación y expansión del turismo internacional se consolida como uno de los fenómenos más notables del 2025.