Zurab Pololikashvili, el actual secretario general de la ONU de Turismo, concluye su segundo mandato enfrentando importantes retos y proyectos por cumplir, luego de una pandemia que paralizó el sector durante dos años. A pesar de estos obstáculos, el turismo mundial está experimentando una recuperación impresionante, aunque con nuevos desafíos, como la gestión de destinos masificados, el impulso del turismo en Asia, África y Latinoamérica, y la transición hacia la digitalización. Pololikashvili se presentará nuevamente en las elecciones para un tercer mandato que se celebrarán el próximo mayo, y asegura contar con el apoyo de la mayoría de los 160 países miembros de la organización.
Durante una entrevista, Pololikashvili reflexionó sobre la transformación del sector turístico tras la pandemia. Aunque reconoce la importancia de dejar atrás el trauma de la crisis sanitaria, subraya que el sector ha experimentado cambios significativos, como la digitalización y el cambio en la mentalidad del viajero, que ahora prioriza los viajes sobre otros gastos. El secretario general también destacó la importancia de descentralizar los grandes destinos turísticos, citando el ejemplo del Reino Unido, donde la gran mayoría de los turistas internacionales solo visitan Londres, sin explorar otras ciudades o regiones del país. Además, enfatizó los esfuerzos por fomentar inversiones en regiones como África, Asia y América, utilizando el turismo como un motor para el crecimiento económico y la creación de empleo.
Una de las principales preocupaciones actuales en el turismo global es el aumento de los precios de los vuelos y la hospedaje, algo que ha sido impulsado por el auge de la demanda post-pandemia. Pololikashvili atribuye este fenómeno a dos factores clave: primero, una demanda superior a la oferta de servicios turísticos; y segundo, el regreso al turismo por parte de la población joven, especialmente aquellos menores de 30 años, que habían estado limitados en sus viajes durante la pandemia y ahora buscan aprovechar al máximo su oportunidad de viajar.
Por otro lado, el auge de las viviendas de uso turístico a través de plataformas como Airbnb ha generado un fuerte rechazo en algunas ciudades debido al impacto que tiene en el costo de la vivienda para los residentes locales. Pololikashvili cree que prohibir estos alojamientos no es la solución, ya que podría aumentar aún más los precios de los hoteles. En lugar de prohibir, aboga por una regulación que permita gestionar los pisos turísticos de manera ordenada, eliminando aquellos que operan ilegalmente y adaptando las medidas a cada ciudad en función de sus particularidades. Considera que la clave está en encontrar un equilibrio que permita a las ciudades beneficiarse del turismo sin afectar la calidad de vida de sus habitantes.
Respecto al turismo masivo, Pololikashvili reconoce que muchos destinos turísticos han implementado medidas para controlar la afluencia de visitantes, como tasas de entrada o limitaciones en el número de cruceros. Sin embargo, él no está a favor de barreras que impidan el acceso de los turistas, ya que considera que el turismo debe ser accesible para todos. En su lugar, aboga por una mejor gestión de los flujos turísticos, adaptando las políticas a las características específicas de cada destino, ya sea urbano, vacacional o rural. La experiencia y el conocimiento de los alcaldes locales son, según Pololikashvili, fundamentales para aplicar las soluciones más efectivas, como lo demuestra la Declaración de Oporto de 2021, donde se abordaron temas relacionados con la gestión del turismo en destinos masificados como Barcelona, Venecia y Ámsterdam.
Finalmente, el secretario general reflexionó sobre el creciente número de turistas en el mundo, con 790 millones de viajeros registrados en los primeros siete meses de 2024, cifra que está cerca de los niveles previos a la pandemia. Aunque aún queda un pequeño margen para alcanzar el récord de 1.400 millones de turistas, Pololikashvili es optimista y cree que este objetivo podría cumplirse en 2024, destacando la resiliencia del sector turístico global.