En el barrio de San Francisco en Campeche, el mal estado de una casa antigua abandonada provocó el colapso parcial de su fachada y techo, sin causar víctimas, pero generando alarma entre los vecinos. El incidente, que ocurrió en un inmueble ubicado en la calle 10-B, entre Rosales y 45, fue alertado por un fuerte estruendo que hizo que los residentes se acercaran y descubrieran que parte de la estructura había caído al vacío. La rápida reacción de las autoridades fue esencial para evitar que se registraran daños mayores.
Policías locales y personal de Protección Civil arribaron al lugar para acordonar la zona afectada y asegurar que no ocurriera otro accidente. En la calle, quedaron esparcidos restos de materiales de construcción de la casa, de estilo colonial, y algunos árboles que crecieron sobre el techo durante años de abandono. Esta vegetación contribuyó al desgaste estructural del inmueble, aumentando el riesgo de su colapso total.
Las autoridades locales informaron que la casa en cuestión llevaba casi una década sin recibir mantenimiento, lo que permitió su deterioro progresivo. Este hecho ha puesto en riesgo a las viviendas cercanas, ya que la estructura de la casa colapsada podría seguir cediendo si no se toman las medidas adecuadas para evitarlo. La falta de intervención en su mantenimiento dejó el edificio vulnerable, lo que provocó que fuera un refugio para personas en situación de calle, lo cual aumentó aún más los peligros asociados con el inmueble.
Como resultado del incidente, las autoridades decidieron clausurar la propiedad de forma definitiva, con el fin de prevenir futuros peligros para los transeúntes y vecinos. Las personas que usaban la casa como refugio fueron reubicadas y se espera que el lugar sea completamente desocupado y asegurado en los próximos días. Mientras tanto, el caso ha generado preocupación sobre el creciente número de viviendas en estado de abandono que podrían representar riesgos similares en otras áreas de la ciudad.
Este colapso subraya la necesidad urgente de intervenciones en propiedades abandonadas, especialmente en zonas históricas como el barrio de San Francisco, donde el patrimonio arquitectónico está en constante riesgo de deterioro. El incidente también ha reavivado el debate sobre la falta de mantenimiento y la seguridad en las viviendas desocupadas de Campeche, un problema que podría tener consecuencias más graves si no se abordan adecuadamente.