El Caribe Mexicano atraviesa un periodo de estabilidad turística, pese a encontrarse en temporada baja. Durante la semana del 16 al 22 de agosto, los destinos de Quintana Roo registraron una ocupación hotelera promedio de 63.7%, con la llegada de más de 425 mil visitantes, según datos de la Secretaría de Turismo estatal. Esta cifra refleja que los centros vacacionales mantienen un flujo constante de viajeros aun en los meses considerados menos activos.
Entre los principales polos turísticos destacó la Riviera Maya con 70.7% de ocupación, seguida por Costa Mujeres con 68%, Cancún con 60.4%, Tulum con 61.2% y Cozumel con 59.2%. Estos resultados evidencian que la región sigue siendo competitiva, gracias a la oferta hotelera y a la diversidad de atractivos que captan tanto a turistas nacionales como internacionales.
En cuanto a procedencia, los visitantes de Estados Unidos representaron 38.9% del total, seguidos de México con 33.2% y Canadá con 12.4%. Europa y Sudamérica también aportaron viajeros en menor proporción, reforzando la relevancia de la conectividad aérea. Cancún, con 97 enlaces directos hacia ciudades de América y Europa, continúa siendo el punto estratégico de entrada a la región.
El movimiento turístico se reflejó también en otros sectores, como el de cruceros, con arribos en Cozumel y Mahahual, y la actividad aeroportuaria, que superó las 3,600 operaciones en Cancún, Tulum, Cozumel y Chetumal. Por su parte, las rentas vacacionales sumaron más de 24 mil unidades en operación, con tarifas que rondaron los tres mil pesos por noche y ocupaciones entre 44% y 54%, consolidándose como complemento al hospedaje tradicional.
